domingo, 4 de noviembre de 2012

EL GALEÓN FANTASMA



Siempre ha existido leyendas de barcos fantasmas, tesoros perdidos en el mar y de espíritus piratas...  ¿Y si algunas de esas historias fueran reales?

El 5 de septiembre del 1622 dos barcos españoles el Atocha y la Margarita partieron con rumbo a España cargados de riquezas provenientes de América.
A 60 Km de la costa de Florida un potente huracán alcanzó ambos barcos dejando solamente 60 supervivientes del Margarita, matando a todos los tripulantes del Atocha y hundiendo todas las riquezas de las embarcaciones.
Al llegar a España se enviaron navíos a recuperar el tesoro perdido pero solo se rescataron las riquezas de Margarita, del Atocha no quedaba ni rastro.

Años después en 1970 un cazatesoros llamado Mel Fisher y su familia, decidieron ir en busca del Atocha y recuperar su tesoro. Durante 13 años la búsqueda se redujo a la ruina, estaban en la quiebra sin dinero para financiar el proyecto ni parar pagar a los buzos.
La mujer de Mel Fisher y su hijo mayor
salieron un día con un barco llamado Northwind a encontrar el tesoro, ese mismo día su hijo encontró dos cañones de bronce pertenecientes al Atocha. Al día siguiente los marineros y el hijo de Mel afirmaban que habían tenido visiones de un barco fantasma y que los cañones estaban malditos. No sabemos si estas afirmaciones son ciertas o eran meras supersticiones pero lo que si es cierto que el aquel día el Northwind se hundió y la mujer de Mel Fisher y su hijo murieron ahogados.

Esto hizo que el cazatesoros se hundiera, aunque no por ello renunció a la búsqueda.
En el 1985 Mel Fisher encontró el naufragio del Atocha a 18 metros de profundidad, junto a el había un tesoro que contenía 127.000 monedas de plata, lingotes de oro, 700 esmeraldas, 2.500 piedras preciosas, cadenas de oro, joyería, platas…
Mel Fisher se hizo multimillonario aunque tuvo que pagar un alto precio que fue la muerte de su hijo mayor y su mujer.

1 comentario:

  1. Dos entradas, 10 de noviembre. Interesantes. Bien escritas. A ver si coges ritmo y escribes asiduamente

    ResponderEliminar